LA IDEA

Árboles peregrinando, aportando conciencia al camino, portando esperanza, limpiando el aire, aclarando mentes, enraizando en destino, oxigenando La Tierra.

Tenemos que cuidar el aire, esta contaminado, el clima esta desquiciado, invierno 2015 en manga corta, precipitaciones escasas…

Soy voluntario de la ASOCIACIÓN PLANTAMOS ARBOLES, criamos árboles desde que recogemos las semillas, hasta que los regalamos con unos dos años de existencia, el año pasado salieron de nuestro vivero 8.000 arboles, regados con agua de lluvia y energía solar.

Somos una asociación pequeñita, familiar, que no solo regala arboles para ser plantados, sí no que con talleres como en los huertos del retiro, siembra también conciencia, para que otros puedan hacer lo mismo, que es tan simple como plantar árboles,  también acudimos a la cárcel de Valdemoro, donde nos esperan los presos del pabellón 4, modulo de respeto, nos ayudan en el trabajo de sembrar y hacer crecer esos arboles que vamos a ir repartiendo a lo largo del año, nos ayudan con los árboles, pero nos ayudan con algo que no es tan fácil de ver, con la voluntad todo se puede cambiar, la voluntad de estos hombres por transmutar el pasado, en ese pabellón donde no existen anestesias (drogas, violencia) es digna de admiración, por cierto es muy curioso que allí dentro tengan una conciencia tan elevada de lo necesarios que son los arboles para cuidar el aire, que es el que respiramos todos.

Los árboles son nuestro filtro para el envenenado aire que respiramos, también debemos actuar en no envenenarlo, de ahí surge LA IDEA, de la simbiosis árbol-bicicleta, la bicicleta nos ayuda a reducir nuestra huella contaminante, en mi caso el redescubrimiento de la bicicleta vino a raíz de una operación importante y su uso en la posterior recuperación.

Primero me permitió soñar mientras estuve postrado dos meses en cama sin comer, después pedal a pedal recuperando la condición física, esos sueños me llevaban a viajes imposibles y hacia destinos marcados.

Desde que me desplazo en bicicleta por Madrid, sumado a la actividad de plantar árboles, han despertado en mi una conciencia sobre lo importante que es reducir nuestro impacto en La Tierra, en este caso en el Aire, en el Clima, árbol-bici son dos herramientas excelentes para ello.

Esos  primeros destinos marcados en el mapa (los viajes imposibles están aparcados de momento), son la Sierra de Gata, y Santiago de Compostela, mientras trabajaba con los árboles, la idea ronroneaba por la cabeza, por fin he decidido realizarlos, peregrinando con un árbol, que enraizara en el sitio de destino.

Dona Vida, Crea Oxigeno.